lunes, 20 de junio de 2016

El drama de los desplazados internos.

El día 20 de junio, cada año, se recuerdan a todos los refugiados del mundo. Supongo que para mejorar sus condiciones de vida o para acabar con las circunstancias que empujan a los seres humanos a dejar sus hogares y países para ponerse a salvo. Parece paradójico que en el siglo en el que se piensa que la humanidad ha avanzado mucho, en el que nos consideramos cada vez más civilizados, sea también el siglo en el que hay más refugiados de la historia. Me pregunto si lo de "civilizados" no es un eufemismo. La ONU calcula que existen actualmente más de 65 millones refugiados en el mundo. ¿Qué civilización es ésta?
En varios países, muchos no tienen ni siquiera la categoría de refugiados ya que esta categoría se otorga a los que han podido salir de su país. Hay una gran cantidad de huidos que se llaman "desplazados internos". Éstos son los que abandonan sus hogares a causa de la guerra o de la inseguridad y se instalan en otras zonas de su propio país. Son refugiados dentro de su país. Muchos viven en los campamentos improvisados u organizados por su propio gobierno. En muchos países de África dónde hay conflictos internos, los desplazados viven en una verdadera miseria. Pues, la ONU no les reconoce y por tanto, los organismos de las Naciones Unidas no les amparan. Se supone que tienen que recibir ayuda y protección de sus gobiernos que, en la mayoría de los casos, tienen otras prioridades o están preocupados por el conflicto. Los ONGs nacionales tampoco tienen suficientes medios para ocuparse bien de ellos. Desgraciadamente no es un hecho aislado. Esta realidad está en numerosos países. La encuentras en Somalía, Sudán del norte, Sudán del Sur, República Democrática del Congo, República Centroafricana, Nigeria, Mali, Camerún, Libia etc.
Allí encuentras todo tipo de desgracia humana: Los que tienen fuerza suelen ir a trabajar por la población local que les paga en comida; Los grupos armados suelen aprovecharse de las condiciones precarias y las frustraciones para reclutar a los jóvenes en sus filas; Las niñas son objeto de vejaciones sexuales por parte de los sinvergüenzas que aprovechan de la miseria y la promiscuidad del lugar para engañarlas. Los niños nacen en condiciones infrahumanas.
El futuro de estas personas está supeditada a la estabilidad del país. No es sorprendente encontrar a algunos que ya han hecho más de diez años en esas condiciones mirando cada mañana el horizonte alguna señal de paz que no llega. A veces, los campamentos de desplazados no son fijos. Se desplazan según va llegando el peligro. Vivir en un campamento de desplazados es una desgracia que solamente los que lo han experimentado saben describir. Los hay incluso que van de campamentos en campamentos, empujados por la guerra y acaban cruzando la frontera para convertirse en refugiados según los términos de la ONU. Entonces, se instalan para mucho más tiempo todavía respetando las estrictas medidas de los países que los acogen.
Hablar de los refugiados y los desplazados debería implicar poner en marcha las medidas para acabar con los conflictos. La lacra de guerra es la peor manifestación de la especie humana.
                                               Gaetan

No hay comentarios:

Publicar un comentario