martes, 12 de abril de 2016

Un nuevo proyecto para el desarrollo de África (2)

Las preguntas que se hacen en muchos foros en Europa con respecto a África son de este tipo: ¿Desde que se ayuda a los africanos, cuando el continente dejará de ser dependiente? ¿Adónde van todas las ayudas que se dan cada año desde la descolonización? ¿Por qué África sigue a la cola del mundo en cuanto al desarrollo?
Los que hacen estas preguntas tienen razón. África lleva recibiendo ayudas desde décadas y salvo unos cuantos países que intentan salir, muchos siguen envueltos en un sinfín de problemas. Muchas son evidentemente las causas de este hecho. La corrupción, la desorganización, la falta de fe en sí mismo, la impunidad etc. son las lacras que arrastra el continente que le impide emerger. Pero también los intereses económicos y geo-estratégicos de los países ricos tienen que ver el subdesarrollo. Por tanto, la pregunta que habría que plantear es la siguiente: ¿se ha ayudado África a desarrollarse de verdad?
Hay quienes piensan que la ayuda a África es su propio veneno. Estos incluso llegan a plantear a Europa suprimir las ayudas y a África, rechazarlas. Bien es verdad que cuando uno tiene asegurado la comida trabaja menos. También es verdad que el que da, manda. Sin embargo, sería un planteamiento demasiado radical que requiere matices.
Nuestro proyecto (AUDE) tiene un enfoque diferente. Pensamos que siempre hay que empezar en algún lugar para arrancar. Es muy difícil pedir a un país que se desarrolle si no se le ofrece herramientas de desarrollo. Por eso AUDE quiere ir a la raíz de los problemas y solucionarlos desde allí. La raíz está en la educación. Nuestro lema es: "Atrévete a educar a los africanos y verás cómo se desarrollan".
Lo nuestro plantea una ayuda que tiene finalidad y tiene fin. En primer lugar, tiene finalidad concreta ya que el que da su dinero, puede conocer al estudiante al que está ayudando. Además, puede seguir su evolución y sabe que en cuatro años, ya tiene a un universitario completamente autónomo. Otra cosa es si consigue trabajo o no pero eso es común a todos los que acaban los estudios en todo el mundo. El hecho es que el beneficiario tendrá las herramientas para transformar su país. En segundo lugar, la ayuda que se da tiene fin porque una vez que el beneficiario empieza a trabajar, se apunta a la Asociación para empezar a cotizar a su vez. De esta manera, AUDE podrá ayudar a más gente. El objetivo final es que los beneficiarios sean muchos y que la Asociación deje de funcionar en España para seguir funcionando solamente allí. Es lo que llamamos auto-desarrollo. Por tanto, arrancamos en España como punto de partida pero el objetivo final de acabar funcionando en África con los mismos africanos como punto de llegada. 
AUDE como se ve, es no solamente un proyecto de desarrollo directo sino también una apuesta metodológica.
(Para conocernos www.audesarrollo.es).

1 comentario:

  1. Me parece que tiene muchísimo sentido y espero que esa sea la solución correcta porque como bien dices, la ayuda de verdad sería que consigan ser capaces de ser autónomos los países en sí y que no dependan de directamente de otros.

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